Estropeé una noche perfecta, un día perfecto.
Tuve un tonto arrebato. Hablábamos de algo que quizá él podía hacer, por mi, sólo por mi, sin mas sentido que el de estar más tiempo conmigo. Y me dijo que no, que no lo haría. Salí corriendo del lugar donde estábamos, no quería seguir hablando, no podía soportar el dolor que ese simple no me causó. Se enfadó, hasta el punto de decir que lo mejor era terminar con todo aquello en ese mismo momento. Perdí el control un segundo, y he echado a perder la paciencia que creo haber demostrado todo este tiempo. No encuentro las palabras para hacerlo cambiar de idea, no sé que decir ni que hacer. Le dije que algunas veces me resultaba insoportable la idea de saber que nunca sería para mi, que nunca habría más de lo que hay. Él me pidió que hablase, que me desahogase, y abrí con esas palabras la maldita caja de Pandora de su conciencia, de sus remordimientos. Y ahora no sé qué hacer para volver a cerrarla, ni siquiera sé si se podrá, y a ratos, ni siquiera sé si debo seguir intentándolo.
El tiempo es un regalo... Y no todo el mundo está dispuesto a darlo. Es algo qmuy complicado. A mi pareja le pasa lo mismo, y no entiende lo que me llega a doler. Entrar y salir sola siempre por la puerta de casa, no poder hacer planes, no encontrar el espacio para compartir, hace que mi ilusión desaparezca dando paso a un dolor difícil de destruir.
ResponderEliminarUff, que difícil el decirte algo, no estes enfadada contigo misma para empezar no te sirve para nada solo un dolor de cabeza, solo pediste lo que necesitabas mas tiempo con él.
ResponderEliminarQue mas os queda si no es el tiempo? El tiempo es a veces escaso y a veces es eterno, recuerda que tu tiempo vale mucho, aséelo saber.
Besos, Felices fiestas.
¿Y tú lo estropeaste? No, Jo: fue él quien lo estropeó, así que lo perdones o no, al menos no vayas encima a sentirte culpable, ya sólo faltaría eso. El egoísta fue él (bueno, como todos los hombres, salvo escasísimas excepciones) y encima se pone a decir que lo mejor sería terminar... ains, me recuerda a mi ex cuando éramos novios, siempre estaba con lo mismo porque sabía que yo era una tonta enamorada que le pedía que lo pensara, que yo le amaba, etc. etc. Y una vez que al final perdí los nervios y le dije: pues vale, cortemos... dos días después estaba en mi puerta como si nada, y ni siquiera hizo alusión a lo que había pasado. Y he pensado mil veces que ojalá no hubiera vuelto... si no fuera porque fue el padre de mi hija, diría que fueron 23 años perdidos por completo.
ResponderEliminarNo te entristezcas, Jo, sabes que todo se arreglará porque siempre vuelve a ti. Pero por favor, ¡¡¡no te culpes!!!
No sabria bien que decirte, ni tan si quiera se si deberia, porque es tu historia y tu la escibes como mejor te parece aun asi...es doloroso...yo...al final no pude soportarlo mas, y rompi con todo...Pero en tu historia eres tu quien debe decidir
ResponderEliminarun besito