martes, 15 de febrero de 2011

Hace muchos muchos años, en un día como hoy...

Hoy es mi cumpleaños, cumplo muchos.
En el trabajo nadie se acordado, aunque trabajo codo con codo con las mismas tres personas siete horas durante cuatro días y diez durante otros dos. Luego descansamos. Muchas horas, muchas conversaciones, mucho de todo.
No voy a quejarme, no he tenido quinientas felicitaciones en el facebook, porque tampoco tengo uno. He recibido las que debería recibir, como es eso... no están todos los que son, pero son todos los que están, ¿se dice así? o ¿es al revés? En fin... da igual.
Tú quisiste ser el primero en felicitarme, a pesar de la era glacial que nos ha invadido, quisiste, pero fallaste por pocos minutos. Fue él quien lo hizo, un libro, una rosa, y cientos de besos fueron su regalo. Eso y no otra cosa ha hecho de este día de cumpleaños algo especial, unos minutos.
No habrá tarta ni velas, tuve una cuando cumplí los quince, y ya ni siquiera sé hacer la cuenta de los años que han pasado sin usar la calculadora. No saldré a festejarlo, no hay con quien. Al final nada es distinto de otros años, sólo esos pocos minutos. He tratado de conservar la felicidad que sentí en esos instantes, he tratado de que me dure todo el día, al fin y al cabo hoy es mi cumpleaños. Pero... no sé la hora que saldrá al pie de lo escrito, no consigo ponerla bien, pero son exactamente las 17:05, y hace rato que el efecto de esos minutos se me ha pasado.
Quedan poco menos siete horas para que acabe mi día especial, un día que es sólo mío, bueno, mío y de los miles de personas que de seguro también nacieron este día, y no se me ocurre nada que hacer con ellas.
Así que....
¡FELIZ CUMPLEAÑOS JO!

Gracias, muchas gracias.

2 comentarios:

  1. Un poco tarde, un poco lejos, pero desde el corazón, ¡FELIZ CUMPLEAÑOS!
    Y todos los besos que debas contar, cada uno con una vela encima.
    :)

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